viernes, 18 de julio de 2008

Doble sobreelevación, ¿doble seguridad?

En la crta del Rinconcillo a la altura del Colegio Mediterráneo, la seguridad vial está duplicada mediante una sobreelevación de asfalto y otra de PVC atornillada con apenas dos metros de separación. Estas medidas preventivas para reducir la velocidad llevan varios días coexistiendo, lo cual provoca desconcierto entre los conductores, con los consiguientes atascos en horas punta. Solicitamos que el organismo competente solucione este problema.

5 comentarios:

Landi dijo...

Gracias por haber incluído 'Algeciras Press' en vuestros enlaces. Sigo leyéndoos.

Anónimo dijo...

No estaría mal un poco mas de coordinacion en seguridad vial, hay sitios en los que ponen dos medidas disuasorias para que no corran los coches y lugares en que hacen falta al menos una desde hace mucho. Yo de lo que me alegro es de que parece que con lo del petroleo la gente se empieza aplantear eso de coger el coche porque si un poco mas que antes.

Anónimo dijo...

Hoy he pasado por allí y por lo visto ayer ya lo han arreglado.Efectividad 100 %

Anónimo dijo...

NO ME JODAS! A ver si va a ser verdad que leen esto?

Anónimo dijo...

Estos pasos elevados están regulados en el Reglamento General de Circulación, donde se dice que no se considerarán obstáculos en la calzada los resaltos en los pasos para peatones y bandas transversales siempre que cumplan la regulación básica establecida al efecto por el Ministerio de Fomento y se garantice la seguridad vial de los usuarios.

El problema está en que hasta ahora el Ministerio de Fomento no ha emitido ningún tipo de normativa al respecto, por lo que todos estos resaltes y pasos de peatones elevados que se han instalado en las vías para obligar a reducir la velocidad, no tienen cobertura de ninguna norma técnica que haya sido dictada por la administración con competencias (Es decir, el Estado), ni tampoco están homologados.
Es decir, estos elementos no tienen cobertura legal técnica, por lo que son obstáculos en la vía, estén o no estén señalizados.

El colmo de la aberración en seguridad es utilizar los pasos de peatones elevados, sin el paso de peatones, tal y como ocurre en nuestra ciudad. Osea, son obstáculos puros y duros y cualquier siniestro que se produzca por su causa será responsabilidad de quien lo haya instalado.