sábado, 9 de febrero de 2008

Juventud, divino tesoro

Evidentemente, divino tesoro cuando se puede disfrutar de ella. Actualmente nuestros jóvenes están disfrutando como van pudiendo. Esto es así porque, si quitamos el botellón del fin de semana, ¿que otra cosa ofrece la ciudad a los jóvenes? Bueno a esta pregunta se me ocurren respuestas como, carreras de quads, el ya mencionado botellón, las cada vez más típicas pintadas en las fachadas de algunas casas y más cosas que según las ordenanzas municipales están prohibidas. ¿No será que al no tener muchas opciones, los jóvenes se aburren y hacen lo que se les ocurre? Si no ofertamos opciones de ocio saludables para nuestros jóvenes y no se vigila adecuadamente la acción de los mismos ¿que tendremos en un futuro no muy lejano? Opciones de ocio saludables eh, macrodiscotecas no son de lo más saludable que deseamos los padres.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si a la juventud actual le gusta tanto el motor como me gustaba a mi, y sigue gustandome, ¿porque no hace el ayuntamiento algo?
En mi juventud existia una zona entre el Rinconcillo y San Jose Artesano que se llamaba EL Polvorin donde la gente ibamos a pegar saltos con las motos, fuera del trafico y mas o menos controlado.

Hoy no existe nada, así que como dice la entrada, los jovenes tienen que tener la cabeza ocupada, la tienen pero en una zona peligrosa que son las calles.
Ya se podria buscar algun lugar para hacer algo similar con ayuda de aficionados al motor que seguro que salen a patadas y de paso darle una motivacion a esta generacion que está tan confusa.