Este vídeo nos lo manda un colaborador del blog y en él se puede apreciar el estado en el que queda la Cañada de los Tomates tras un día de lluvia. La zona queda totalmente cubierta por el barro y se ve como la mancha llega hasta bien entrada en la avenida Aguamarina. Muchos usuarios de esta vía tienen que buscar alternativas a esta cuando las lluvias llegan.
domingo, 30 de marzo de 2008
Cañá de los Tomates
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6 comentarios:
Este video se merece un aplauso, si señor
Enhorabuena a quien lo haya hecho
¿Pero qué esperáis de un Ayuntamiento que no tiene en condiciones ni las calles más céntricas de su ciudad?
-No comment-
PD: Mi enhorabuena también al creador del "reportaje"; debería haber un video como este de cada rincón de Algeciras para que se viera el auténtico estado de la ciudad.
No siempre la culpa la tiene el ayuntamiento, esta vez los culpables son los señores de la constructora que está construyendo una urbanización en la Cañada. Desde que están con la obra están levantando todo ese barro con las máquinas y camiones que entran y salen durante todo el día y claro, es caer unas gotitas de agua y montarse la que se monta....creo que las imágenes dejan claro lo que se forma, no?
Si, bueno, las constructoras, a las que luego no se les paga y se paralizan las obras, con las que se tienen unas deudas espantosas, etc etc...
Otra muestra de cómo perjudican estas obras (aunque necesarias por otra parte) está en el mismo secano, si pasáis por la cuesta de correos veréis, o mejor dicho, ya no veréis el semáforo ya que el andamio lo tapa absolutamente.
Las cosas bien hechas Dios las bendice, pero creo estamos malditos.
A "Susanita":
Ese acerado lleno de barro que sale en las imágenes...si, puede que una constructora tenga la culpa (lo ignoro). Pero quien debe de CUIDAR, Y VELAR y en su caso, instar a quien sea para su reparación, como parte del entramado de aceras para el uso del peatón, es EL AYUNTAMIENTO.
Un saludo.
Estoy de acuerdo con este último anónimo. Puede que la constructora sea la culpable pero para eso está el ayuntamiento, para obligar a que haga algo para evitar el vertido de barro y en su defecto multar. Es lo mismo que pasa con la instalación del gas ciudad: Usted me pone el gas o el ono o lo que quiera, pero la carretera me la deja como estaba. Ah, y nada de parches, asfaltado como Dios manda.
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